¿A qué esperas para conocerme?

La moneda con que su pareja cariñosa acostumbra a retribuir los incontables servicios de un pagafantas ofrecidos en barra libre es el menosprecio, la ignorancia, cuando no el abuso sicológico y emocional, llegando incluso en ocasiones al maltrato físico.

Otras situaciones de mujer arriba

Ven acércate luna. Quiero que mires estas fotografías Me arrodillé delante del señor de la casa y empecé a observarlas. Son fotografías de sesiones con mis esclavas y sumisas a lo largo de todos los años que llevo en esto y que son nada más y nada menos que 25.